Todo lo que necesitas saber sobre los pastores australianos
Muy pocas razas son tan “vaqueras” como el pastor australiano. A pesar de su engañoso nombre, el pastor australiano creció paseando alrededor de venados y antílopes del oeste de Estados Unidos como el brazo derecho de rancheros y pastores de ganado. En la actualidad, muchos tutores están dispuestos a enfrentar los desafíos que conlleva el cuidado de una raza de gran energía y a cambio cosechar los frutos de su talento y devoción.
Imponentes, inteligentes, ágiles y con un fuerte instinto de pastoreo y vigilancia, los pastores australianos son fáciles de entrenar y se desempeñan con éxito en una gran cantidad de actividades y trabajos. Su temperamento puede variar y suelen ser un poco reservados cuando no están trabajando. Aunque son propensos a algunos problemas de salud, por lo general son una raza longeva dispuesta a seguir a su ganado en las buenas y en las malas.
La mayoría de las características de los pastores australianos son muy obvias, excepto por su nombre. Se cree que sus ancestros en realidad provienen de los Pirineos, la cadena montañosa ubicada entre Francia y España, quienes llegaron a América del Norte con pastores vascos a mediados del siglo 19, posiblemente luego de haber hecho una parada en Australia.
Una vez en los Estados Unidos, se ganaron la reputación pastores robustos capaces de afrontar cualquier terreno, clima y ganado. Antes de que los deportes caninos se volvieran populares, también fueron conocidos por presentarse en rodeos y realizar trucos. En 1957 se fundó el club ASCA (Australian Shepherd Club of America) para promover la raza.
La Federación Cinológica Internacional los clasifica en el grupo 1 de perros pastores y perros boyeros (excepto perros boyeros suizos). Las razas de este grupo comparten la característica de pastorear, guiando y protegiendo a los rebaños. También, destacan en funciones como perros guía, de protección, detección de drogas, compañía y de rescate.
Características físicas
El pastor australiano es un perro de complexión robusta y talla mediana, de apariencia animada y ágil, con una gran resistencia. Los perros de esta raza poseen muchos rasgos distintivos, entre los que se incluyen múltiples colores de pelaje, orejas triangulares, ojos claros y colas cortas. La parte superior de su cráneo es de la misma longitud o un poco más larga que la de su hocico, el cual va adelgazando desde la base hasta terminar en una punta redondeada.
Poseen orejas triangulares de inserción alta, cuyas puntas les llegan un poco por debajo de los ojos. Pueden tener los ojos color café, azul, verde, ámbar o cualquier variación o combinación de estos colores. La heterocromía, es decir, que tengan cada ojo de un color distinto, es muy común en esta raza.
Los pastores australianos son un poco más largos que altos y suelen presentar una cola corta. Su pelaje es moderadamente largo y áspero, ya sea lacio u ondulado. Presentan un collar de pelo esponjoso alrededor del cuello, los hombros y el pecho. Los colores de pelaje más comunes son el negro, azul mirlo, rojo y rojo mirlo, con o sin grandes manchas color blanco o fuego.
También existen las variantes miniatura y toy. Es posible desarrollar a los miniaturas (con una altura de entre 33-46 cm) a partir de la reproducción de pastores australianos estándar más pequeños, mientras que los de tamaño toy (de menos de 36 cm) se necesita realizar la cruza con otras razas que también sean toy. Si estas variantes debieran reconocerse o no como razas independientes aún es objeto de debate.
Los pastores australianos poseen un manto grueso de doble capa. El manto exterior es áspero y repelente al agua, mientras que el interior es denso y aislante. Juntos, el exterior y el interior crean el ambiente perfecto para que garrapatas, pegarropas y cualquier otro residuo se esconda entre su pelo y se abra paso hasta la piel. El cepillado y peinado diligentes son necesarios, sobre todo para perros que realizan muchas actividades al aire libre. Aplicar un desenredante ayudará a deshacer cualquier nudo y mata de pelo difícil de cepillar durante la rutina de grooming.
Los pastores australianos mudan de pelo en cantidades moderadas y se puede esperar que cambien “todo su pelaje” dos veces al año durante el cambio de estación en el verano y el invierno. Un cepillo de pines y una carda serán las mejores herramientas para mantener su pelo en excelentes condiciones y la muda al mínimo. Algunos mudan de pelo más que otros y también podrían beneficiarse de un deslanador.
Ejercicio y espacio
Los pastores australianos son muy activos y capaces. Poseen grandes niveles de energía y una gran resistencia física para trabajar que necesitan emplear todos los días. Dependiendo de cada perro, tan solo una hora de actividad física vigorosa debería ser suficiente. Requieren ser guiados durante el ejercicio, por lo que no basta con dejarlos salir solo para que corran por ahí. Realicen actividades físicas juntos como correr, nadar, andar en bicicleta o patinar.
Los perros de esta raza se encuentran entre los mejores perros de agilidad y de disco o frisbee, También tienen una obsesión por pastorear, se dice que pastorean casi cualquier cosa que se mueva. Buscar que participe en un programa para perros pastores que le ayude a preservar y desafiar sus instintos de pastoreo, sería una gran manera de desarrollar su instinto natural.
Comportamiento
El pastor australiano es una raza hecha para la acción. Son física y mentalmente ágiles, responsivos, audaces y dedicados. Les gusta estar ahí para sus humanos, sin importar la situación.
Un pastor australiano ejercitado y entrenado de manera adecuada es el perro más divertido del mundo. Por otro lado, suelen ser testarudos y seguros de sí mismos. Los pet paretns deben ir un paso adelante de ellos, ya que, si tu pastor australiano no está siguiendo las órdenes, ¡él comenzará a darlas!
El grado de sociabilidad varía entre cada pastor australiano. Mientras algunos son extrovertidos, otros suelen ser distantes con los extraños. Fieles a su naturaleza protectora, pueden ser territoriales y posesivos. Es importante que estén bien socializados y que reconozcan los límites que se les impongan.
Un pastor australiano rara vez debería ladrar; solo debería hacerlo para alertar, al momento de jugar y cuando se le pida “hablar”. Pueden emitir chillidos agudos y rápidos para expresar su emoción mientras zigzaguean entre los postes en la pista de agilidad o trabajan en nuevos movimientos avanzados para el heeling o heelwork (deporte artístico en el que el perro hace trucos mientras camina al ritmo de su tutor, pegado a su pierna izquierda).
Los pastores australianos poseen un ladrido agudo y para llamar tu atención emitirán un ladrido más fuerte y estridente. Estos perros suelen desarrollar el hábito de ladrar para lidiar con la frustración, así que asegúrate de ofrecerle la atención y el ejercicio suficientes a tu mejor amigo para limitar los ladridos por estrés.
Entrenamiento
De acuerdo con una investigación, unos pastores australianos aprendieron órdenes nuevas luego de 25 a 40 repeticiones y obedecieron el 50 % de las veces o más. Están clasificados como perros con un nivel de inteligencia promedio para el trabajo, junto con el lebrel irlandés y el pointer. Los pastores australianos son los típicos perros que aparecen en los pósteres de agilidad, heelwork, obediencia, perros de asistencia y cualquier otro deporte que se te ocurra.
Para dar ese 100 % de esfuerzo extra, necesitan enfoques de asesoramiento y entrenamiento firmes que hagan que el aprendizaje sea interesante y no tediosamente repetitivo. Necesitan consistencia, pero no demasiado severa porque, a pesar de ser un poco tozudos, los pastores australianos son sensibles.
Nutrición
Una dieta de alta calidad es esencial para mantener a tu pastor australiano en las mejores condiciones. Asegúrate de no sobrealimentarlo, ya que el aumento de peso predispone a todo perro a un sin número de problemas graves de salud. Como todos los perros poseen una tasa metabólica diferente, consulta a tu veterinario para determinar el peso ideal de tu mejor amigo.
Salud
Los pastores australianos son una raza activa y ágil que ama estar al aire libre. Es importante mantener una rutina de cuidado preventivo regular que incluya la vacunación contra enfermedades infecciosas como el moquillo, el parvovirus, la rabia y la leptospirosis (según el lugar en donde viva), así como tratamientos preventivos antiparasitarios.
Es particularmente importante que discutas con tu veterinario acerca del tratamiento preventivo contra el gusano del corazón más adecuado para tu mejor amigo. Como cualquier otro perro, los pastores australianos son susceptibles ha dicho parásito, pero, como un gran número de ellos posee una mutación genética que los vuelve muy sensibles a la ivermectina (el ingrediente activo en los tratamientos preventivos contra el gusano del corazón), la mayoría de los veterinarios evita recomendarles a los perros de esta raza productos que contengan dicho ingrediente.
Existen muchas otras opciones que no contienen ivermectina, por lo que los tutores en definitiva tienen otras maneras de prevenir esta terrible enfermedad en sus perros.
Los pastores australianos son especialmente propensos a varios problemas oculares. Los tutores que vivan en altitudes elevadas deberían considerar el uso de accesorios de protección ocular para limitar la exposición a la radiación ultravioleta, lo cual podría prevenir el pannus, una enfermedad a la que los pastores australianos muestran cierta predisposición.
Los pastores australianos suelen ser una raza robusta, pero, al igual que todos los perros de raza pura, presentan problemas de salud que se sabe que son hereditarios o que la raza parece desarrollar con mayor frecuencia que otras.
Una de las enfermedades hereditarias mejor conocidas que presenta la raza se conoce como mutación del gen MDR-1, la cual los vuelve sumamente sensibles a ciertas dosis de medicamentos que la mayoría de los perros toleran sin problemas. Otros problemas de salud incluyen, pero no se limitan a: las cataratas, el pannus, la anomalía del ojo del collie, la atrofia progresiva de la retina y los cálculos urinarios.
Como se mencionó antes, la ivermectina es el fármaco con el que la mayoría de los perros con mutación del gen MDR-1 suele tener problemas y se usa para tratar una variedad de infestaciones parasitarias, así como en los tratamientos preventivos contra el gusano del corazón. Sin embargo, existe una sencilla prueba que puede ayudar detectar esta mutación y se recomienda que todo tutor de un pastor australiano considere realizársela a su mascota.
Curiosidades
- Muchos han querido reclamar a esta raza como suya. Los pastores australianos han sido conocidos como pastores españoles, pastores de Nuevo México y pastores de California.
- Los cachorros de padres con pelaje mirlo tienen un 25 % de posibilidad de nacer ciegos y sordos.
- Han sido empleados como perros de servicio, policía, detectores de droga, así como de búsqueda y rescate.
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