¿Qué es la ansiedad por separación?
La ansiedad por separación es un problema de comportamiento importante, que puede causar una enorme angustia emocional tanto a los perros como a los tutores. Puede darse en perros de cualquier edad o raza, y es una de las razones más comunes por las que los pet parents abandonan o dan en adopción a sus perros.
¿Cuáles son los signos?
Un perro con ansiedad por separación se vuelve anormalmente ansioso cuando se separa de su tutor. La gravedad de la ansiedad y los comportamientos que muestra el perro varían de un individuo a otro.
Algunos perros se ponen ansiosos si no pueden ver realmente a su tutor; lo siguen constantemente de una habitación a otra. Otros, pueden tolerar estar solos en una habitación, pero miran con frecuencia para asegurarse de que su tutor sigue en casa y luego vuelven a jugar o a morder un hueso en otra zona.
El más común es cuando los perros se ponen ansiosos hasta que el tutor abandona la casa. Algunos perros se ponen más ansiosos en cuanto el tutor se va, y otros tienen un periodo de tiempo durante el cual se sienten cómodos solos, pero se ponen ansiosos si su tutor se ausenta durante un periodo prolongado.
Esta ansiedad suele aumentar cuanto más tiempo pasa fuera el tutor, y puede dar lugar a comportamientos como:
- Lloriqueos, ladridos o aullidos
- Caminatas
- Salivación excesiva
- Hiperactividad
- Arañazos, mordiscos o excavaciones
- Orinar o defecar en zonas donde normalmente no lo hace
- Destrucción de objetos personales o domésticos.
Es importante mencionar que estos comportamientos solo se muestran en ausencia de su tutor.
Los perros con ansiedad por separación suelen presentar uno o varios de estos comportamientos. Inclusive, se sabe de perros que se rompen los dientes y se desgarran las uñas y la piel intentando salir de las jaulas, y que destrozan puertas y saltan por las ventanas cuando aumenta su ansiedad.
Estos perros también suelen mostrarse demasiado excitados cuando su tutor vuelve a casa. Pueden lloriquear, saltar o correr en círculos. Este comportamiento puede prolongarse durante un tiempo anormal después de que su tutor llego a casa, y el perro tendrá la misma respuesta extrema, aunque el tutor sólo haya estado fuera unos minutos.
¿Qué causa la ansiedad por separación?
Nadie sabe, a ciencia cierta, por qué algunos perros desarrollan ansiedad por separación y otros no. La ansiedad por separación puede darse en animales de hogares con múltiples o con una sola mascota.
Se considera que es más probable en animales con antecedentes de maltrato o de múltiples hogares, como:
- Los perros que han sufrido una separación traumática de un tutor anterior, como los abandonados en refugios.
- Los perros que no han tenido una interacción social normal con personas u otros animales, especialmente cuando eran cachorros.
También, un perro que nunca ha tenido un problema previo puede desarrollar ansiedad por separación cuando se produce un cambio en su rutina, como un cambio en el horario de trabajo del tutor, o después de que la familia se haya trasladado a un nuevo hogar. Algunos perros pueden desarrollar ansiedad por separación a medida que se hacen senior.
Es importante que los tutores de perros con este padecimiento comprendan que el comportamiento inadecuado de su perro se debe a la ansiedad y no a que el perro esté enfadado o intente «vengarse» de ellos.
Regañar o castigar al perro solo provocará confusión, más ansiedad y un comportamiento peor. Al grabar en vídeo a algunos perros cuyos tutores los han castigado por su comportamiento destructivo, se ha demostrado que el nivel de ansiedad de esos perros aumenta justo antes de que el tutor vuelva normalmente a casa.
En estos casos, se cree que el comportamiento problemático del perro no se debe a la ansiedad por estar solo, sino a que el perro está ansioso por el probable castigo que recibirá.
¿Qué debo hacer si sospecho que mi perro tiene ansiedad por separación?
El primer paso es comentar la situación con tu veterinario y someter a tu perro a un examen físico completo. Es importante asegurarte de que el comportamiento de tu perro se debe realmente a la ansiedad por separación y no a otra cosa.
Por ejemplo, la micción inadecuada puede producirse si tu perro nunca estuvo totalmente adiestrado o si padece una infección del tracto urinario. Un perro puede ladrar cuando está solo porque siente que está protegiendo su propiedad, o porque puede oír a otro perro.
Tu veterinario puede recomendarte algunas pruebas para asegurarse de que tu perro no tiene ningún problema médico subyacente, que podría contribuir a los problemas de comportamiento o empeorarlos.
Las pruebas pueden incluir:
- Pruebas de sangre
- Un examen de orina
- Pruebas de tiroides
- Un control de la presión arterial
- ECG (electrocardiograma).
Estas pruebas también serán importantes para verificar el estado de salud de tu perro antes de administrarle cualquier medicación.
Asegúrate de que tu veterinario conoce cualquier otra medicación que esté tomando tu perro y cualquier problema de salud previo.
¿Cuál es el tratamiento?
El enfoque más eficaz suele ser una combinación de ejercicios de modificación del comportamiento y medicación ansiolítica. Es esencial tener en cuenta que tanto la medicación como los ejercicios de modificación del comportamiento son partes importantes para este tratamiento.
En la mayoría de los casos, el uso de un solo componente no será suficiente para lograr el éxito. La medicación se utiliza para ayudar a tu perro a relajarse, de modo que pueda concentrarse en realizar los ejercicios de modificación de conducta; los ejercicios son los que realmente cambian la respuesta del perro a una situación estresante, con el tiempo.
Medicamentos
Los medicamentos más utilizados son la clomipramina y la fluoxetina. Se trata de medicamentos aprobados para el tratamiento de la ansiedad por separación que pueden ser recetados por tu veterinario. Dado que estos medicamentos pueden tardar varias semanas en alcanzar niveles efectivos, al principio pueden recetarse fármacos de acción corta como el alprazolam.
Los perros con ansiedad por separación tienen un mayor nivel general de ansiedad, y los fármacos utilizados en el tratamiento deben administrarse con regularidad, no sólo cuando el perro parece ansioso.
La paciencia es importante; algunos fármacos pueden tardar semanas o meses en ser eficaces. A menudo es necesario probar varios fármacos o combinaciones de fármacos para determinar cuál funciona mejor para cada perro
Modificación del comportamiento
Tu veterinario puede ayudarte con los ejercicios de modificación del comportamiento o remitirte a un experto en comportamiento animal o a un adiestrador de su zona. Para obtener los mejores resultados, es importante que la persona con la que trabajes tenga experiencia en el trabajo con perros con ansiedad por separación.
Los ejercicios de modificación del comportamiento deben realizarse de forma constante (durante semanas o meses) para ver resultados, y puede ser necesario continuarlos de por vida.
Enseña independencia
Evita recompensar el comportamiento de búsqueda de atención. Recompensa a tu perro con caricias, premios u otras atenciones solo cuando esté tranquilo y calmado.
Prémialo por estar tranquilo
Si tu perro está sentado o echado en una zona de descanso tranquila de la casa, recompénsalo. Puedes colocar un tapete o una cama para que tu perro vaya a ella cuando se calme. Ponle juguetes y enséñale a permanecer en esa posición.
Un perro tranquilo no jadeará, no moverá la cola ni hará ningún otro movimiento. Utiliza una palabra como «tranquilo» o «quieto» como señal para el comportamiento relajado
Cuando tu perro aprenda a estar relajado contigo cerca (esto puede llevar días o semanas), aumenta lentamente la distancia entre ustedes. Dale un premio cuando esté tranquilo. Si tu perro muestra signos evidentes de estar relajado (baja la cabeza o suspira), dale una recompensa especial. No recompenses el comportamiento pegajoso, pero tampoco ignores a tu perro.
Evita los rituales de salida
Casi todo el mundo tiene una rutina establecida cuando sale de casa: Afeitarse o maquillarse, ponerse los zapatos, recoger las llaves, ponerse el abrigo, etc. Estas actividades señalan inadvertidamente a tu perro que te vas a marchar, y muchos perros empiezan a ponerse ansiosos en cuanto ven estas señales de salida.
Para insensibilizar a tu perro a estas señales, realiza estas actividades varias veces durante el día, pero no te marches. También puedes intentar salir por otra puerta y bloquear el sonido de la salida.
Quítale importancia a las salidas
Lo mejor es permanecer neutral ante tu perro durante 15-30 minutos antes de marcharte y mientras te preparas. Cuando estés listo para irte, simplemente lleve a tu perro a la habitación o jaula donde estará mientras no estés, proporciónale juguetes y márchate tranquilamente sin decir nada.
Cuando regreses, sé discreto. No saludes a tu perro hasta que se haya calmado. No castigues ni regañes a tu perro. Esto agrava el problema y puede hacer que tu perro se ponga más ansioso a la hora que regreses.
Proporciónale seguridad
A menos que el confinamiento aumente la ansiedad, aloja a tu perro en una habitación cómoda y segura o en una jaula espaciosa. Las rejas suelen funcionar mejor que las puertas cerradas cuando se trata de confinar a un perro con ansiedad por separación.
Si tu perro no puede quedarse solo de forma segura, piensa en una guardería canina. Si lo dejas solo varias veces y por muchas horas, considera la posibilidad de contratar a un paseador de perros una o varias veces al día.
Enriquece su entorno
Dale un juguete dispensador de premios o un juguete masticable cuando te vayas. Cambia regularmente el tipo de juguete para evitar que se aburra y dáselo también en momentos en los que tu perro esté tranquilo y no vayas a salir, para que el juguete no se convierta en una señal de partida.
Los perros con ansiedad por separación suelen tener tendencias destructivas, así que te recomendamos usar juguetes resistentes como los Ruffest de Leaps & Bounds para que tengan un mayor tiempo de uso.
Feromonas
Las feromonas son sustancias químicas producidas por el cuerpo que, cuando se huelen, pueden afectar al comportamiento.
Los productos con feromonas, como Adaptil con hormona apaciguadora canina (DAP), pueden ayudar a algunos perros con ansiedad por separación. En muchos casos, el collar puede funcionar mejor que el difusor.
Aumenta el ejercicio
Una rutina de ejercicio y juego es otro componente de la modificación del comportamiento que puede ayudar a tu perro a ser menos ansioso es el aumento de ejercicio.
El ejercicio tiene beneficios tanto mentales como físicos para los perros. Los veterinarios recomiendan entre 45 y 60 minutos de actividad intensa dos veces al día. Si tu perro es un "adicto al sofá", empieza despacio y aumenta la intensidad y la duración a lo largo de varias semanas. Si tu perro tiene algún problema de salud, consulta a tu veterinario antes de hacer ejercicio.
Además del ejercicio, también es importante para la estimulación mental (jugar a buscar, trabajar las órdenes, practicar ejercicios de agilidad en casa o en una clase). Muchas razas se criaron originalmente para realizar un trabajo, y pueden estresarse sin la actividad mental que utilizarían normalmente si estuvieran «trabajando».
Conclusión
Ten en cuenta que tu perro no tiene este comportamiento problemático porque está enfadado contigo o porque intenta vengarse. El castigo, especialmente posterior al evento, solo confundirá y causará más ansiedad.
Empieza siempre con una visita a tu veterinario para descartar problemas de salud. La ansiedad por separación puede ser una situación muy frustrante y traumática tanto para ti como para tu perro, pero con paciencia y un tratamiento adecuado suele mejorar drásticamente.
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