¿Los gatos pueden sufrir de ansiedad por separación?
Muchas personas están familiarizadas con la ansiedad por separación en los perros, pero suponen que no se da en los gatos. Sin embargo, las investigaciones llevadas a cabo por veterinarios especialistas en comportamiento sugieren que la ansiedad por separación también puede aparecer en los gatos.
Contrariamente a lo que se pensaba, los gatos son criaturas muy sociables y pueden establecer fuertes vínculos con las personas y con otros animales. Por lo que, este síndrome podría ser una consideración importante para quienes se enfrentan a problemas de comportamiento felino relacionados con la ansiedad.
¿Cuáles son los signos?
Los signos de ansiedad por separación en los gatos pueden aparecer cuando el gato se separa de su tutor o de otro animal de compañía con el que tiene un fuerte vínculo.
Un gato con ansiedad por separación puede insistir en estar con su tutor en todo momento, incluso siguiéndolo de una habitación a otra. Cuando un tutor se dispone a salir de casa, el gato puede enfurruñarse y esconderse, o intentar interponerse entre este y la puerta. Cuando el tutor regresa, el gato puede mostrar un saludo anormalmente entusiasta.
Algunos de los problemas de comportamiento desencadenados por la ansiedad por separación en los gatos son los mismos que se observan en los perros:
- Vocalizar después de que el tutor se marche
- Orinar o defecar de forma inapropiada (a veces cerca de una puerta o sobre los objetos personales del tutor)
- Ser destructivos (masticar, arañar), aunque con menos frecuencia.
También pueden mostrar su angustia de otras formas menos evidentes, como ponerse demasiado ansiosos para comer cuando se quedan solos o vomitar sólo cuando el tutor no está presente. Un signo menos común en los gatos puede ser el acicalamiento excesivo, hasta el punto de crear una calva en una o dos zonas del cuerpo.
¿Qué causa la ansiedad por separación?
No se sabe con certeza qué causa la ansiedad por separación en los gatos. Se ha especulado que puede haber factores tanto genéticos como ambientales. Quedarse huérfano o ser destetado prematuramente puede predisponer a un gatito a desarrollar ansiedad por separación.
Aunque la investigación futura nos dará más información, por ahora la mejor prevención es socializar adecuadamente a los gatitos para evitar que desarrolle problemas de comportamiento de cualquier tipo.
¿Qué debo hacer si sospecho que mi gato tiene ansiedad por separación?
El primer paso es comentar la situación con tu veterinario y someter a tu gato a un examen físico completo. Es importante asegurarte de que el comportamiento de tu gato no se debe a un problema físico subyacente.
- Por ejemplo, un gato que orina fuera del arenero y/o maúlla mucho puede estar desarrollando una obstrucción o infección del tracto urinario.
- Un gato que se acicala en exceso puede tener una alergia alimentaria
Tu veterinario puede recomendarte algunas pruebas, como estudios de sangre, un análisis de orina, pruebas de tiroides o un control de presión arterial.
Dado que la ansiedad por separación en los gatos no es tan común, puede resultarte útil trabajar con un especialista en comportamiento animal, el cual puede ayudarte a descartar otros tipos de padecimientos relacionados con la ansiedad.
¿Cómo se trata?
En los perros, la terapia más eficaz para la ansiedad por separación suele consistir en una combinación de modificación del comportamiento y medicación ansiolítica. En gatos ocurre el mismo proceso.
Puede ser posible hacer que el momento que rodea a la partida del tutor sea menos estresante para el gato, introduciendo algunos cambios en la rutina habitual.
Durante 15 minutos antes de irte y al volver a casa, debes ignorar a tu gato. Puede ser útil dejarle un juguete que lo distraiga como un dispensador de premios. Otra opción es esconder premios muy sabrosos en distintos lugares de la casa.
Otros juguetes que le gusten especialmente a tu gato deberás sacarlos justo antes de que te vayas y guardarlos una vez que regreses. Cuando regreses, debes ignorar a tu gato hasta que esté tranquilo.
Hacer que el entorno de tu gato sea más estimulante también puede ayudar. Una percha cómoda que le permita ver desde una ventana puede proporcionarle entretenimiento, sobre todo si hay un comedero para pájaros a la vista. También puede ser divertido trepar por cornisas o torres alfombradas con juguetes.
Dejar la radio o la televisión encendidas a bajo volumen puede ser reconfortante; algunos gatos disfrutan con los "vídeos para gatos" con sonidos e imágenes de pájaros y otras criaturas pequeñas.
Algunos gatos pueden estar menos ansiosos con otro animal en casa, pero esto depende de cada gato y puede ser o no una buena solución. En algunos casos, también puede ser necesario administrar ansiolíticos durante un breve periodo de tiempo. Estos medicamentos pueden deben ser prescritos y supervisados por tu veterinario.
Productos relacionados
#petcofriends
@petcomexico
