Los básicos: El uso de correa en perros
Los perros son animales emocionales e impulsivos y siempre buscarán alcanzar lo que llame su atención, cuestión que vuelve los estímulos externos importantes tomando en cuenta que son sumamente difíciles de controlar durante un paseo. Es difícil saber que es lo que está llamando la atención de tu perro todo el tiempo y esto, sumado a la curiosidad que tienen como uno de sus instintos principales, hará complicado anticiparte a todas las situaciones.
La correa es un elemento indispensable en la rutina de paseo y su importancia radica en la seguridad que puede proveer, tanto para tu perro como para ti. Presentar y manejar la correa correctamente no es tan complicado como parece, existen algunas cosas que debes saber.
¡Es un espíritu libre! Pero… Un poco de control no está de más
El olfato es el sentido principal con el que tu perro explora el mundo, durante el paseo, tu perro combina su conocimiento del entorno con los comportamientos que tú solicitas directa o indirectamente. La correa es un accesorio que te ayudará a mantener el control sobre las situaciones que pudiesen presentarse durante el paseo y existen múltiples razones para usarla:
- El uso de la correa evita que tu perro se ponga o ponga a terceros en riesgo.
- La correa es un aditamento que se utiliza en el entrenamiento canino básico y avanzado.
- En CDMX es una disposición oficial pasear con correa a los perros.
- Una correa permite protegerlo de agresiones y estímulos que le causen miedo.
- Con la gran afluencia de autos, reduce los riesgos de atropellamientos o accidentes viales.
Entrenamiento para el uso de la correa
Para introducir un nuevo accesorio o manejo en la rutina de tu perro se puede hacer uso de la llamada “desensibilización sistemática”, una técnica conocida dentro de la modificación conductual, que en resumen, trata sobre la presentación gradual de situaciones u objetos que pudiesen desencadenar episodios de miedo, fobia o agresión y es especialmente útil si el perro es tímido o tiene miedo al accesorio.
1. Para comenzar, debes asegurarte de que tu perro se sienta cómodo usando arnés o collar, ambos pueden ser un buen complemento de la correa, de no ser así, debes practicar para acostumbrarlo gradualmente del mismo modo que con la correa, solo para estar preparados, comenzaremos con la idea de que el perro tiene una gran aversión a los accesorios.
2. Para presentar la correa, aprovecha los horarios de alimentación, colócala a la vista antes de servirle su ración de comida y haz esto durante al menos 1 semana, este periodo puede acortarse o alargarse dependiendo del grado de aversión que tenga tu perro al accesorio.
3. Para continuar, una vez que tu perro se siente cómodo con la presencia del accesorio, se debe continuar con periodos cortos de exposición y contacto, seguidos de la entrega de premios y elogios.
Toma y manipula la correa cerca de su cuerpo, tocando su espalda y entregando premios al mismo tiempo. Engancha la correa al arnés y dejar que se mueva libre y te siga por la casa, de nuevo, elogia y entrega los premios (juguetes, premios, caricias). La regla es hacer de aquello que le causa miedo un proceso largo, con muchos pasos cortos que le demuestren que solo ocurrirán cosas positivas
4. Por último, “aprovecha la rutina”. Poco después de consumir su alimento y tomar agua, es casi una regla que querrá ir al baño, lapsos como esté, serán un gran apoyo en el proceso, engancha la correa y acompáñalo al baño, mantén presentes los premios. Las asociaciones positivas son sumamente importantes en caninos.
Tres «NO» que debes conocer
Conoce las 3 cosas que por ningún motivo debes realizar:
El vínculo emocional y la confianza que se tienen es tan importante como la práctica, tirar de la correa genera incomodidad, dolor e incluso puede generar lesiones. Si no quiere moverse, trabajar a su nivel es la mejor opción, llámalo agachado, en cuclillas con una voz amable y aguda (en la medida de lo posible), si no funciona, solo encuentra el motivador correcto (caricias, comestibles o juguetes).
Las correcciones físicas definitivamente son del siglo pasado y eran motivadas por el desconocimiento de la fisiología del comportamiento. No importa cuál sea el tema que deba corregirse, los tirones y castigos físicos lo empeoran.
Seguramente has visto personas que parece que están siendo paseados por su perro, esto es más común de lo que piensas. Ocurre por una razón, el perro ha aprendido que su avance depende de que tan fuerte tire de la correa. En su lugar, cuando tire simplemente, quédate estático para reforzar la idea contraria, cuanto más tire, menos avanza.
Un indispensable para un paseo seguro
La correa es un elemento indispensable para salir de paseo con seguridad, el grado de aceptación a la misma depende en gran medida de la personalidad de cada perro, si la aversión a la correa o algún elemento del paseo es elevada, la situación deberá ser valorada por un profesional.
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