¿Cómo cuidar de un gatito o gatitos huerfanos?
Los gatitos suelen quedar huérfanos cuando su madre no es capaz de cuidar adecuadamente de ellos. Esto puede deberse a varias cosas como, que no puede producir leche (agalactia), porque tiene anormalidades en su comportamiento, lesiones, complicaciones de parto, o la peor la muerte. Algunos gatitos pueden tener varias semanas de edad antes de que su madre sea incapaz de cuidarlos.
El cuidado de estos gatitos requiere un programa regular de alimentación, eliminación, juego y sueño adecuados, todo ello en un entorno seguro y saludable. En la mayoría de los casos, es una camada entera la que se queda huérfana y no solo un gatito, pero no te preocupes los principios de crianza para una camada de gatitos no es muy diferente a la de un gatito.
Criar a uno o varios gatos huérfanos es una tarea pesada, pero es muy gratificante y posible. Para eso debes tener en cuenta.
- Nutrición y destete
- Limpieza y eliminación
- Temperatura y humedad
- Prevención de enfermedades
- Crianza y socialización
Los gatitos sanos son regordetes, firmes, cálidos, tranquilos y duermen la mayoría del tiempo. Los gatitos poco sanos tienen un tono muscular pobre, están muy activos al principio y lloran mucho para después volverse débiles, tranquilos y comatosos.
Nutrición y destete
Si es posible, haz que los gatitos se alimenten de su madre las primeras 24 horas para permitir la ingestión de calostro. Los gatitos solo pueden absorber los anticuerpos del calostro las primeras 24 horas de vida. Si la madre sigue permitiendo que se amamanten, puede que en unos días esté dispuesta a cuidar de ellos y disminuya tu trabajo.
Si la madre no es capaz de cuidarlos y amamantarlos, será necesario alimentarlos con biberón o encontrar a una madre sustituta. Muchas gatas suelen aceptar y amamantar a gatitos que sean de similar tamaño a los suyos, aunque no será capaz de mantener a las dos camadas, por lo que la suplementación con un sustituto de leche será necesaria.
¿Qué sustituto de leche usar?
No utilices la leche de vaca o cabra como sustituto de la fórmula, ya que no son equivalentes. Tampoco los alimentes con clara de huevo cruda, ya que pueden producirse una deficiencia de biotina debido a una enzima presente en la clara del huevo. La enzima se destruye con la cocción. También la miel puede contener bacterias que pueden ser mortales para los gatitos.
Existen fórmulas lácteas para gatitos preparadas comercialmente y nutricionalmente equilibradas para satisfacer todas las necesidades de los gatitos huérfanos o con desnutrición. También existen recetas de fórmulas lácteas caseras, estas no están equilibradas nutricionalmente y pueden llegar a comprometer su salud y desarrollo.
Solo debes hacer suficiente fórmula para un solo día de alimentación y después guardarla en el refrigerador. Lava y seca bien los biberones y los chupones antes y después de usarlos. Calienta el sustituto de leche en un recipiente con agua a 36-37 ° C antes de alimentarlos y por último mezcla bien la leche antes de darla a los gatitos para que toda la leche se revuelva bien y así disminuir el riesgo de zonas calientes en el biberón.
¿Cómo alimentarlos?
Los gatitos necesitarán eructar durante y después de cada comida. Sostenlos en posición vertical o sobre tu hombro y acaricia su espalda. La alimentación con el biberón debe hacerse con mucho cuidado para evitar el riesgo de aspiración del suplemento con la subsecuente neumonía por aspiración o ahogamiento. Además, el uso del biberón satisface el reflejo de succión, esto ayuda a disminuir la tendencia de los gatitos a chuparse los unos a los otros, lo que podría llegar a causar lesiones en la piel.
Las primeras 24- 48 horas cada gatito debe tomar 1 ml de leche cada hora. Cada día aumenta la cantidad suministrada por comida en 0.5 ml hasta alcanzar un máximo de 10 ml por comida. Los recién nacidos necesitarán de 9 a 12 comidas al día. Durante la segunda semana deberán tomar entre 5 y 7 ml por comida. A la tercera, pueden empezar con un poco de croquetas específicas para cachorros remojadas 3 veces al día y continuar con la fórmula. En la cuarta semana deben recibir de 4 a 6 biberones al día y las croquetas de 4 a 5 veces al día. A la 7 semana ya puede tomar alimentos sólidos. Si te surgen otras dudas sobre como alimentarlos consulta con nuestros expertos o con tu veterinario.
Durante los primeros 10 días, pesa a los gatitos diariamente para controlar su peso y la cantidad de sustituto que debes dar, después pésalos cada semana. Cada gatito debe ganar entre 50 a 100 gr por semana.
El primer signo de enfermedad es la falta de aumento o la pérdida de peso. En general, si los gatitos no ganan peso necesitan más comida, si empiezan a presentar diarrea, posiblemente están sobrealimentados. Ante cualquier alteración que notes visita a tu veterinario.
¿Cómo estimular la eliminación?
Un gatito recién nacido es incapaz de orinar o defecar por sí mismo. Carece del control muscular necesario sobre estas funciones. Deben ser estimulados para orinar o defecar y esta tarea normalmente la realiza la madre. La madre los acicala o les lame la zona anal para estimular estas funciones.
Los gatitos huérfanos deben ser estimulados manualmente por ti. Debe ser estimulado después de cada comida y en cuanto despierta. El proceso es sencillo, se necesita un algodón o una toallita húmeda, se frota suavemente la zona anal y genital y en 1 o 2 minutos el gatito orinará y defecará.
Algunos responden mejor antes de comer y algunos después de comer, intenta ambos momentos para que estén más sanos. Necesitarán ser estimulados de esta manera hasta que los músculos de la vejiga y el intestino se fortalezcan, normalmente a los 21 días de edad. La mayoría de los gatitos podrá eliminar por si solos a las 3 semanas.
La orina debe ser de un color amarillo pálido o transparente. Si es de color amarillo- anaranjado no está siendo alimentado lo suficiente.
Las heces deben ser de un color marrón pálido a oscuro y estar parcialmente formadas. Una coloración verde indica infección y unas heces demasiado firmes indican que no tiene suficiente fórmula.
En cualquier caso, no debes aumentar la cantidad de fórmula, solo aumenta el número de veces que lo alimentas. Si presenta otras coloraciones consulta con tu veterinario.
Temperatura y humedad
Los gatitos jóvenes no pueden conservar el calor corporal ni temblar para crear calor. El suministro de calor corporal como una incubadora, una lámpara, una almohadilla o una alfombra eléctrica, les ayudará a mantener la temperatura corporal adecuada. Con cualquier método debes vigilar su uso en todo momento para evitar que se sobrecalienten o quemen.
Durante la primera semana, la temperatura del aire debe mantenerse entre 29 y 32 ° C y una humedad relativa del 55 al 65%. Durante las 3 semanas siguientes, disminuye la temperatura a 23° C. Utiliza el sentido común. Si los gatitos están amontonados unos encima de otros todo el tiempo, tienen frío, cuando están muy separados, tienen demasiado calor y si están tumbados uno al lado del otro, la temperatura está bien.
Los gatitos con hipotermia (baja temperatura corporal) deben ser calentados lentamente durante 2 o 3 horas hasta alcanzar una temperatura normal de recién nacidos de 36° C. Debe obtenerse una temperatura corporal normal antes de alimentar a estos gatitos. La temperatura corporal normal está entre los 37.7 y 38.8° grados alrededor de las 4 semanas de edad.
Nunca críes a los gatitos en una zona oscura y húmeda. Este tipo de humedad estancada suele ser fría e invita al moho y a las infecciones respiratorias. El control de la temperatura es más importante que la humedad.
Los gatitos deben mantenerse sobre una superficie con buena tracción, como una manta o una tela de borrega. Esto ayudará a desarrollar sus habilidades motoras.
Prevención de enfermedades
Muchos gatitos huérfanos corren un mayor riesgo de desarrollar enfermedades infecciosas, como las de las vías respiratorias superiores. En especial los que no consumieron el calostro de su madre, ya que no tienen buena inmunidad. Debido a la posible falta de inmunidad, es muy importante vacunarlos adecuadamente. En estos casos algunos veterinarios recomiendan empezar a vacunarlos a una edad más temprana de lo recomendada.
Crianza y socialización de los gatitos
Los gatitos huérfanos deben criarse juntos para favorecer su desarrollo social. Deben ser acariciados, abrazados y se debe jugar con ellos durante 30-40 minutos al día, además del tiempo de alimentación y limpieza.
Necesitan estimulación mental y física, además de amor. Si tienen compañeros de camada, se estimularán mutuamente al moverse. Acurrúcate con cada uno cuando lo despiertes para comer y durante un tiempo después de comer. Los peluches suaves pueden ofrecer algo con lo que acurrucarse mientras duermen.
Es importante que tengan interacción con los miembros de tu casa a las 3-6 semanas de edad. Recuerda que todavía son bebes y que hay que tratarlos con cuidado, pero puedes empezar a introducirlos a diferentes ruidos, al procedimiento de aseo, personas nuevas y los demás animales. La socialización temprana y el hecho de que se sientan seguros en su propio entorno ayudará a evitar que surjan muchos problemas de comportamiento en el futuro.
Existen varios libros disponibles para obtener información más específica sobre el cuidado de los gatitos huérfanos y los cuidados veterinarios en general. Con un compromiso de tiempo, cuidado, un poco de sentido común y algo de información básica, puede ser una experiencia muy positiva.
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