6 consejos para que tu perro no sufra un golpe de calor este verano
Puede que pienses que estás tomando las precauciones adecuadas contra los golpes de calor, simplemente asegurándote de que tu perro no se queda en un automóvil caliente en verano. Pero, los golpes de calor pueden producirse con la misma facilidad en el jardín o durante los juegos al aire libre en días especialmente calurosos.
La insolación es una enfermedad peligrosa que puede provocar complicaciones graves e incluso la muerte. Hasta el 50% de los perros que sufren un golpe de calor mueren, la mayoría en las primeras 24 horas. Saber cómo evitar el sobrecalentamiento salvará la vida de tu perro, pero también debes prepararte y saber cómo actuar si tu perro es víctima de un golpe de calor.
No dejes a tu perro en el automóvil en verano
¿Cuándo es “seguro” dejar a un perro en el automóvil en verano? Para estar completamente seguros, la respuesta es “nunca”. En un día de 30 grados, la temperatura dentro de un auto con las ventanillas arriba puede alcanzar los 38 grados en 10 minutos.
Ni siquiera estacionarse en un lugar con sombra es infalible, ya que el sol se mueve y muchos días sigue haciendo calor en la sombra. Incluso un auto con las ventanas semiabiertas se calienta mucho. Y dejar las ventanillas abajo no es seguro, porque tu perro puede saltar y perderse.
Sé prudente: Deja a tu perro en casa o, si es posible, llévalo contigo al interior de la tienda.
Conoce los límites de tu perro
Algunos perros se calientan más rápidamente que otros. Los bulldogs ingleses, por ejemplo, sienten calor simplemente por tumbarse en el patio en un día caluroso. Cualquier raza con un hocico corto puede tener problemas para refrescarse debido a su anatomía diferente.
Los perros se refrescan jadeando. Las razas de hocico corto, conocidas como braquicéfalas, tienen menos superficie dentro de la boca, por lo que se calientan más rápido que un perro de tamaño similar en las mismas condiciones. Lo mismo ocurre con los perros con sobrepeso y de pelo oscuro.
Los perros de razas grandes también corren el riesgo de sobrecalentarse antes si padecen una enfermedad conocida como parálisis laríngea. La parálisis laríngea retrasa la apertura del cartílago que permite la entrada de aire en la tráquea. Esto también ralentiza el enfriamiento, y puede provocar rápidamente un sobrecalentamiento en un día caluroso, especialmente durante el ejercicio.
Aunque, los perros senior se ven beneficiados por el sol, sobre todo cuando tienen algún padecimiento articular. También pueden tener problemas para disipar el calor de forma adecuada, ya que la mayoría puede sufrir de enfermedades cardiacas o respiratorias, e inclusive les puede costar más trabajo alejarse de los rayos solares por la poca movilidad que algunos tienen.
En cualquier caso, es importante que siempre estés al pendiente de tu perro.
Ten especial cuidado cuando visites lugares húmedos o calurosos
A muchos nos gusta viajar en verano, y cada vez hay más hoteles que aceptan perros, lo cual es una gran noticia. Sin embargo, ten en cuenta el cambio de calor y humedad en su destino y cómo afecta a tu perro cuando viaja.
Dale a tu perro varios días para aclimatarse a un clima más caluroso y/o húmedo cuando vayan de vacaciones. Y viaja siempre con una fuente de agua de la que tu perro pueda beber fácilmente, como un bebedero de plástico o un plato plegable que pueda sujetarse a su correa, para que siempre tenga agua disponible.
Consigue un termómetro y aprende a usarlo
Tienes un perro, así que aprende a tomarle la temperatura. Conocer su temperatura puede ser muy importante para saber qué hacer por él. También es fundamental conocer la temperatura corporal normal si sospecha que tu perro puede estar sobrecalentándose y correr el riesgo de sufrir un golpe de calor.
Compra un termómetro digital de temperatura. Los de lectura rápida son los mejores: la mayoría te darán una lectura en 10 segundos o menos. Cuando lo saques del envase, escribe “PERRO” con un plumón permanente para no confundirlo después con el que usas para tus hijos.
A menos que tu perro no se encuentre bien, es probable que necesites un compañero que lo sujete mientras le mides la temperatura. Levanta la cola y localiza el ano justo debajo. Pon un poco de aceite lubricante, el aceite para bebés o el aceite de cocina funcionan bien, en el extremo del termómetro e introdúcelo suavemente alrededor de 1 centímetro en el ano de tu perro. Pulsa el botón y espera a que emita un pitido antes de leerlo.
Familiarízate con las técnicas de enfriamiento adecuadas
Supongamos que estás preocupado porque tu perro corre el riesgo de sobrecalentarse. Jadea en exceso, ha estado al sol o ha hecho ejercicio al aire libre en verano. Le tomas la temperatura según el método anterior y da 39 grados o más. ¿Qué debes hacer?
Empieza a refrescar a tu perro con agua tibia (no helada). La manguera del jardín es un buen lugar para empezar. Ofrécele agua fría para beber. Mójalo bien y cúbrelo con toallas humedecidas con la misma agua. Agarra las llaves y vete al veterinario, pero llama en el camino para avisarles de que vas a ir y que se preparen. Por el camino, enciende el aire acondicionado o baja todas las ventanas.
Reconocer rápidamente los signos de un golpe de calor es crucial para el éxito del tratamiento.
El asfalto también se calienta
Las almohadillas de las patas de tu perro pueden parecer resistentes y coriáceas, pero pueden ampollarse y quemarse sobre el pavimento caliente. De nuevo, ten en cuenta el calor y la temperatura del asfalto antes de sacar a tu perro a pasear o a correr en un día caluroso.
Con estos consejos tu mejor amigo y tú podrán pasar unas vacaciones de verano seguras e increíbles.
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