¿Por qué mi gato ha dejado de acicalarse?
Los gatos son de los animales más ordenados y limpios, no ensucian mucho tu casa y se encargan de su propio aseo. Por eso es tan importante que estés atento a cuando tu michi deje de acicalarse.
¿En qué debes fijarte?
Los gatos que no se acicalan tienden a tener problemas en la piel y el pelo. Es típico encontrarlos con pelo graso, lo que provoca que su pelo se pegue y se formen nudos, también puedes encontrar escamas y esteras, sobre todo en los gatos con pelo largo.
Normalmente, estas lesiones empiezan por las patas posteriores y en la parte baja de la espalda.
¿Cuáles son las posibles causas?
Cualquier situación que haga que tu michi no se sienta bien puede provocar que deje de acicalarse, con el tiempo varias enfermedades pueden producir las alteraciones en la piel que mencionamos. A menudo, los gatos con enfermedades crónicas presentan otro tipo de signos además de la falta de acicalamiento.
Para poder acicalarse por completo, sobre todo en la parte trasera, tu michi tiene que ser capaz de realizar contorsiones increíbles. Todos estos giros y flexiones son muy difíciles y en algunos casos, imposible si tu michi sufre de sobrepeso, ya que no podrá hacerlo gracias al volumen extra que tiene.
Del mismo modo, el dolor de la artritis en los gatos impide hacer esos movimientos para acicalarse.
Tratamiento y opciones de aseo
Pide una cita con tu médico veterinario si empiezas a notar que tu michi deja de acicalarse. Tu médico puede determinar la causa de la falta de deseo o incapacidad de tu michi para acicalarse y darle un tratamiento adecuado. Bajar de peso será necesario para los gatos obesos y el tratamiento para los gatos con problemas articulares varía, pero suele incluir analgésicos, suplementos y otras terapias para reducir el dolor y la inflamación.
Durante la recuperación, tu michi necesitará ayuda para acicalarse. Un cepillado regular puede ser todo lo que necesita para eliminar las escamas y el pelo enredado, distribuyendo los aceites esenciales por todo el pelo.
En los casos más graves, una visita a la estética para que lo bañen y le quien el pelo enredado puede acelerar el proceso. Si, a pesar del cepillado regular, el pelo de tu michi sigue estado graso, un baño cada 1 o 2 meses le ayudará. Utiliza agua tibia y champú para gatos. Si bañarlo es demasiado estresante para ti o para él, realiza citas periódicas con tu estilista.
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